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Federico Pelli: 'Advierte dificultades de las pymes iniciantes para perdurar' (22/06/2021)
Federico Pelli: 'Advierte dificultades de las pymes iniciantes para perdurar'

El comercio, la industria y las pymes siguen representando grandes desafíos para aquellos que se animan a emprender. El contexto económico actual, sumado a la pandemia de Covid-19 que ya va por su segundo año consecutivo, deja un escenario complejo e incierto.

No obstante, los jóvenes siguen buscando potencialidades para apostar al crecimiento pese a las dificultades. “El desafío debe ser poder sobrevivir y pasar este mal momento hasta que la actividad económica empiece a recuperarse, algo no muy superador pero que en este panorama extremadamente crítico, significaría un gran logro”, señaló al respecto el presidente de la rama joven de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came) Federico Pelli y agregó que “sólo 2 de cada 10 pueden superar los 5 años de vida”.

En una entrevista con El Territorio, el empresario de Tucumán destacó Las inquietudes y retos que tienen hoy los jóvenes emprendedores. Apuntó en ese sentido a la disciplina y la capacidad de adaptación a los cambios para sobrellevar la situación y bajar la alta tasa de mortandad que tienen las empresas iniciantes.

¿Qué desafíos tiene hoy un joven empresario en Argentina?

El año 2021 nos encuentra a los jóvenes empresarios con los viejos desafíos de siempre, como lo son el emprender proyectos en contextos siempre complejos en lo impositivo, financiero y laboral, que nos presenta nuestro país históricamente. Pero a su vez con un factor novedoso y único, poder hacerlo en el marco de la segunda ola de la pandemia mundial ocasionada por el Covid 19, con las consecuencias socioeconómicas que esto implica. Sin dudas para poder sobrevivir y superar esto con nuestras empresas lo más integras posibles, la situación nos demandará nuevas habilidades y capacidades. Creatividad, flexibilidad a los cambios, innovación, resiliencia, deberán ser incorporadas en nuestro comportamiento diario como conductores de equipos, pero también transmitidas e inculcadas a nuestros trabajadores. El desafío debe ser poder sobrevivir y pasar este mal momento hasta que la actividad económica empiece a recuperarse, algo no muy superador pero que en este panorama extremadamente crítico, significaría un gran logro.

No hay una receta mágica y general, pero claramente hoy más que nunca los emprendedores necesitarán mucha disciplina y capacidad de adaptación a cambios de situaciones.

¿Cuáles son los obstáculos que deben traspasarse para sostenerse en el tiempo en el mercado?

En este contexto de pandemia y todas las dificultades que trajo aparejado, los principales obstáculos que hubo este último tiempo fueron las demoras en provisión de insumos o la imposibilidad de importar que generan desabastecimiento, restricciones para transportar mercadería entre distintas provincias, las restricciones horarias, caídas históricas de facturación . Más allá de las dificultades de siempre como son la pesada carga impositiva, la inflación, el altísimo costo laboral, la industria del juicio cada vez más intensa, hoy en día la capacidad de consumo de la gente muy debilitada extendida por un largo periodo sin lugar a dudas perjudican cualquier actividad y su sostenimiento en el tiempo.

Por supuesto que no todas las actividades económicas del comercio, la industria y la producción presentan las mismas complejidades y sufren el mismo impacto, pero lo que sí es seguro es que los obstáculos que genero el sistema de cuarentenas y fases de aislamiento fueron transversales a todos, y perjudicaron muchísimo a las Pymes.

¿De qué manera afecta la crisis económica nacional a los empresarios, principalmente de las pymes?

Los impacta de forma directa. De hecho el balance de 2020 según los relevamientos realizados por Came son categóricos: 90.000 comercios cerrados, 42.000 Pymes que ya no existen más, y 200.000 puestos de trabajo destruidos en el sector formal, más allá de una paralización absoluta de inversiones y emprendimientos que ante este escenario de crisis e incertidumbre lógicamente no se están concretando.

Más allá de estos datos duros, anímicamente la situación es compleja. Empresas que tuvieron que cerrar, despedir empleados de muchos años, descapitalizarse, en fin, ver derrumbarse su proyecto y sustento de vida, en cuestión de pocos meses.

¿Están viendo un éxodo de empresarios que se van del país, o bien ven que los jóvenes buscan quedarse y crecer en Argentina? 

Hay una cantidad creciente de jóvenes emprendedores que están dejando el país y apostando a desarrollar sus proyectos en otras latitudes, como también algunos que desde aquí directamente trabajan remotamente con clientes del exterior. Esto no escapa a la dinámica de éxodo que sucede con muchos jóvenes en general, profesionales o con determinados oficios, que se están estableciendo en otros países, especialmente Estados Unidos, Canadá, algunos de nuestra región o de Europa. Esto claramente generado por una falta de proyección positiva sobre el futuro próximo y aún en el mediano y largo plazo. A su vez hay jóvenes que se quedan y la pelean localmente, y buscan impulsar sus emprendimientos en el país, siguen apostando y pienso que a ellos es a quienes debemos sostener sin lugar a dudas, y debemos apoyar para que no cambien de postura y se quieran ir frente a los permanentes escenarios negativos que les planteamos, ya que ellos son el capital estratégico que tenemos como nación. Sin emprendedores no hay empresas, no habrá empleo, y mucho menos tendremos futuro.

¿A qué objetivos se apunta para el futuro? Cómo se visualiza el escenario de aquí a un par de años? 

Creo que el objetivo debe ser concientizar a la clase política de la importancia de generar cultura emprendedora en los jóvenes argentinos, y en ese sentido gestionar para que desde las más tempranas edades en los establecimientos educativos se incluya en los programas de formación materias como emprendedurismo y desarrollo de competencias para armado de negocios. A su vez insistir con proyectos de nivel nacional, provincial y municipal a través de nuestra gran red de Came Joven, que tiendan a generar un entorno más amigable para emprender, y poder bajar la enorme tasa de mortandad de empresas jóvenes que tenemos actualmente en Argentina, donde sólo 2 de cada 10 pueden superar los 5 años de vida.

En cuanto al escenario dentro de un par de años, estoy convencido que la pandemia y toda la crisis sanitaria, social y económica que esta produjo, nos debería hacer reflexionar sobre la importancia en la búsqueda de consensos para tener un país viable y con futuro. Nos debería servir para darnos cuenta que sin un sector privado fuerte y pujante, y sin empleo genuino, tampoco tendremos un país como el que nos merecemos los argentinos, uno mucho mejor del que hoy tenemos.

Si este aprendizaje no se da, lamentablemente seguiremos en el mismo camino que venimos trazando hace más de 40 años, sumergiendo más compatriotas a la pobreza, con menos empresas, menos clase media, con estándares de vida cada vez más deteriorados, en definitiva sin futuro para nuestros las próximas generaciones de argentinos. 

Fuente: El Territorio